Soterrar el tren entre Los Lirios y el parque San Miguel
Descripción
El 25 de julio de 2002 se firmó el convenio para la integración del ferrocarril en la ciudad de Logroño entre el Ayuntamiento de Logroño, el Ministerio de Fomento y el Gobierno de La Rioja. Desde entonces han pasado 21 años sin que se haya cerrado la herida que mantiene abierta la línea del ferrocarril a su paso por la capital riojana.
En estas dos décadas se ha completado casi en su totalidad la primera fase del soterramiento. En el anterior mandato se avanzó en la urbanización del parque, se inició la construcción de la subestación eléctrica junto a la calle Miguel Delibes y se solventaron los problemas de accesibilidad de la estación de autobuses. Sin embargo, aún queda rematar la urbanización de Avenida de Lobete, la zona soterrada que transcurre por el PERI 3 y su entorno y finalizar los trámites para poder enajenar los terrenos del PERI Ferrocarril.
En este tiempo tampoco se han dado los pasos necesarios para que la obra prosiga tal y como se concibió en su día. Por delante aún quedan 3,5 kilómetros de trazado en trinchera, que provocan ruidos y problemas de seguridad. Tenemos, por tanto, una deuda pendiente con el barrio de Los Lirios y con los ciudadanos que viven junto al tramo ferroviario entre Vara de Rey y la zona oeste.
La fase II del proyecto de integración del ferrocarril es la que afecta a la zona oeste de la ciudad -desde Duques de Nájera al entorno del cuarto puente-, pero parte su ejecución depende del estudio de viabilidad de la mejora del corredor ferroviario entre Logroño y Miranda de Ebro que sacó a contratación el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (MITMA) en febrero de 2023 y que se demorará al menos un año más.
En este estudio se planteará la alternativa del futuro corredor ferroviario. Tres son las opciones que se están barajando: dos de ellas discurrirían por el norte de la región atravesando diversos municipios de la Sonsierra, Rioja Alta y Álava; mientras que la tercera se desarrollaría paralela a la Autovía del Camino para desviarse hasta enlazar con Pancorbo. De salir adelante esta última, obligaría a cambiar parte del actual trazado del ferrocarril de Logroño, donde el acceso del tren se realizaría por el entorno del Parque San Miguel y no por El Cortijo, lo que evitaría tener que soterrar el tramo de la zona oeste de la ciudad.
Entendemos, por tanto, que la ejecución de la segunda fase del proyecto del soterramiento debe plantearse cuando el Ministerio haga público el itinerario definitivo del corredor ferroviario. Sin embargo, el Ayuntamiento de Logroño debe dar los pasos necesarios para evitar que el proyecto del soterramiento quede paralizado cuando finalicen las actuaciones que están actualmente en marcha.
Los propios técnicos del soterramiento reconocen que varias propuestas que estaban en el estudio informativo pueden acometerse sin tener que esperar a la resolución del Ministerio. Se trata del cubrimiento de la línea férrea en el barrio de Los Lirios, de la prolongación del túnel entre Baltasar Gracián y Tirso de Molina y del soterramiento entre el nudo de Vara de Rey y el Parque San Miguel (fase III).
Para prolongar el cajón ferroviario entre Baltasar Gracián y Tirso de Molina y cubrir las vías en el barrio de Los Lirios, el coste sería menor al estar la obra ferroviaria hecha y requeriría una inversión de unos 9,5 millones de euros. Esta actuación permitiría, además, ampliar el paso del puente que enlaza Tirso de Molina con Avenida de Lobete y daría respuesta a las demandas de los vecinos que han solicitado construir un nuevo acceso para los peatones, puesto que ahora sólo tiene una acera estrecha que limita y dificulta el tránsito peatonal.
El tramo que requeriría una inversión mayor es la trinchera situada entre Vara de Rey y el Parque San Miguel, de unos 22 millones de euros. Sin embargo, para reducir el esfuerzo inversor inicial, planteamos que esta obra se ejecute en dos fases, la ferroviaria, por un lado, y la urbanización, por otro.
Entendemos que es un proyecto perfectamente asumible, ya que el importe global de estas actuaciones estaría en torno a los 31,5 millones de euros, que sería asumido por el Ayuntamiento de Logroño, el Gobierno de La Rioja y el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible; y podría optar a financiación de fondos europeos.
Otra intervención que podría realizarse es la conexión de la calle Portillejo con el cuarto puente (dentro de la fase II del soterramiento), que dotaría a la ciudad de una nueva infraestructura viaria que mejoraría la conectividad de la zona oeste y favorecería el desarrollo urbanístico del futuro Plan Parcial Camino de Fuenmayor. Si bien, entendemos que este proyecto requiere de una inversión fortísima y que debe debatirse entre todas las fuerzas políticas dentro de ‘Pactos con Ñ’ para determinar su viabilidad.
Al igual, creemos que el Consejo de Administración de la Sociedad ‘Logroño Integración del Ferrocarril 2002’ debe reunirse a la mayor brevedad para desbloquear la tramitación pendiente del soterramiento del ferrocarril ahora que ya se ha conformado el nuevo Gobierno de España.
Con los anteriores fundamentos presentamos la siguiente MOCIÓN
1.- Instar al Ayuntamiento de Logroño a que solicite la convocatoria urgente del Consejo de Administración de la Sociedad Logroño Integración del Ferrocarril 2002.
2.- Que en el orden del día se incluya:
- La licitación de la urbanización de Avenida de Lobete, de la zona soterrada que transcurre por el PERI 3 y su entorno y la enajenación de los terrenos del PERI Ferrocarril.
- Encargar el proyecto técnico para cubrir el trazado ferroviario en Los Lirios y la prolongación del cajón ferroviario entre las calles Baltasar Gracián y Tirso de Molina.
- Instar a ADIF a que proceda a buscar una solución técnica en el tramo de Tirso de Molina que permita ampliar el paso y las aceras.
- Solicitar un estudio y el proyecto definitivo para soterrar la trinchera entre el nudo de Vara de Rey y el Parque San Miguel.
3.- Que dentro de ‘Pactos con Ñ’ todos los partidos políticos de la Corporación municipal debatamos sobre la viabilidad de solicitar un proyecto técnico que estudie enlazar la calle Portillejo con el cuarto puente y su afección con el trazado ferroviario.